Desde el mismo momento que abrimos la historia clínica a nuestro paciente sabemos que, muy probablemente, seamos los médicos que con más frecuencia les atendamos durante el período de tratamiento (nuestras consultas son semanales).
Por este motivo, estamos atentos a cualquier problema de salud que vaya surgiendo intentando resolverlo como su médico de cabecera o remitiéndole al especialista que consideremos más adecuado. No simplemente nos dedicamos a corregir problemas del peso sino también, corregimos trastornos que afecten al estado general de nuestros pacientes dentro de la medicina occidental que todos conocemos. |
Incluso, dada la confianza creada en nuestra relación médico-paciente, nos piden asesoramiento en problemas relativos a familiares o amigos. Esto no es simplemente más cómodo para nuestros pacientes, también favorece el tratamiento nutricional pues podemos prescribir la medicación que no perjudique a su proceso metabólico en curso.
Con el tiempo nos hemos dado cuenta que como no simplemente nos piden un tratamiento nutricional, abrimos – desde casi el inicio de nuestra andadura - la consulta a problemas de salud propias de un médico de cabecera. Esto complementa nuestro espíritu vocacional de asistencia completamente integral. |